Saab se muere

Saab está a punto de morir.
Una marca legendaria con coches únicos a punto de desaparecer.


Torpeza, directivos poco hábiles, falta de apoyo o incapacidad para alcanzar el "volumen" necesario para ser alguien hoy en la industria del automóvil.
Lo del volumen es lo que dicen los entendidos del sector. Esta frase lo justifica todo. En los últimos años ha servido de excusa para fusiones y ventas incomprensibles, alianzas que no funcionan y que confunden al consumidor. Modelos "compartidos" que despistan. Coches premium con motores de generalistas, que comparten más del XX% de los componentes. Excesivo sin sentido.
Lo de Saab es una tragedia. Pocas marcas tienen el espíritu de Saab. La van a dejar morir y nadie parece ser capaz de salvarla. Ni siquiera el gobierno sueco por patriotismo.
Con ella desaparece una marca diferenciada con un gran concepto de comunicación: Saabista.
En fin, debe ser inevitable. Es culpa del volumen. Como ya ocurrió con Rover, otra gran marca con alma. O incluso Jaguar estuvo ahí, y se salvo por los méritos de la colonia Tata. Si Churchill levantara la cabeza!!!

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Hablando con un amigo, me sugirió un punto de vista muy diferente de esta "muerte": por lo visto Saab ha intentado varias veces escindirse de General Motors (a veces una gran ala protectora; otras, un enorme lastre) sin éxito, sobre todo porque el precio de dicha operación era increíblemente alto. Pero con esta jugada, Saab acaba de salir del corralito y podrá volar libre en pocos años. Al tiempo...

aSplit dijo...

Esperemos que estés en lo cierto.
Larga vida a Saab