El efecto Axe

La estrategia de Axe me encanta. Es un ejemplo de como romper una categoría con un posicionamiento innovador, interesantísimo y que han logrado mantener consistentemente muchos años. El efecto Axe.

La comunicación impecable: exagerada, divertida, fresca. Un buen ejemplo de creatividad sobre una gran estrategia. Un anunciante como Unilever apostando por nuevos caminos.





Y en esa apuesta, siempre han obviado el reason why del efecto Axe. ¿De dónde sale la idea del efecto Axe? Salió del departamento de i+d o de marketing, o por el contrario fue un ejercicio de planning de comunicación. Sí es lo último, se volvió para atrás en la concepción del producto para incluir componentes que de verdad atraigan sexualmente a las mujeres. Sin tener más información que la del espectador y al no mencionarse nada en ningún sitio, lo más probable es que sea sólo un concepto publicitario. Que pena la verdad, por que si esta gran idea se pudiera apoyar con algo sería mucho más redondo y con más sostenibilidad.

Este tema también ha generado interés a Craig Roberts de la Universidad de Liverpool, que ha realizado un estudio que parece dar credibilidad al efecto Axe. Según su análisis, los hombres que usaron Axe fueron vistos como más atractivos por las mujeres que aquellos que usaron un desodorante placebo, sin perfume. Los hombres con la fragancia Axe obtuvieron una media de 4,2 sobre una escala de 7 y los del placebo, 3,8. Curioso.

De los componentes no se dice nada, pero podría exisitir una misteriosa partícula XJK recolucionaria que está en todos los Axe y que atrae irresistiblemente a las mujeres.